22 feb 2012

carta para Bielefeld.


hoy debe nevar en Bielefeld,
y las raíces,
los pétalos de las casas,
las gentes  que salen del trabajo,
todos ellos,
deben sufrir un frío terrible.

si me muestro demasiado certero
incluso puedo llegar a imaginarte enredada en juegos
con Sofi, Wanda, Ileas y Rufus.

ellos nunca lo sabrán pero una vez quise ser atractivo
estimulantemente atractivo,
sin excesiva autocritica,
entonces llegó la madrugada y me arañó las entrañas
para terminar arrojándo a la hoguera
todos mis proyectos y sensateces

ahora me río donde más me escuece,
me resisto a deshumanizarme,
y procuro no relacionarme con los egos del mundo.

cuando salgo del barrio,
tardo tres vidas en regresar de nuevo al barrio
a no ser que me sorprenda un leviatán
o me detenga una eternidad de suspiros frente al portal de tu casa.

te entrego este sentimiento
por todas aquellas noches de carne y pueblo
cuando soñadores
y sin servicio de correspondencia que nos ubicara
arábamos la tierra con las manos llenas de esperanza.

poco más puedo decir frente a este último vislumbre
al menos para éste que te escribe,
con esta tristeza de españa
si continuo esta carta
temo empezar a divagar de forma escandalosamente dramática:

hoy debe nevar en Bielefeld,
y hace frío en mi casa.